El proyecto estadounidense Pillowprince comparte el sencillo R the Straights OK. El universo musical que propone esta canción se desarrolla dentro de una estructura sólida, fresca e interesante, influenciado por géneros como Indie Rock y Alternative Rock. La música refleja las emociones de la letra de manera atractiva, profunda y fuerte, creando una pista que cautiva tanto en su sonido como en su mensaje.
La magia de la canción recae en la letra y la interpretación vocal, que construyen una reflexión desafiante, inteligente y fina. Esta se burla de la homofobia y la ignorancia, resultando en un himno rock con momentos pegajosos. Además, la canción transmite sus emociones y mensaje de manera directa, mostrando una empatía destacada hacia la comunidad queer.
Las letras, que provienen directamente de cosas reales que la gente les ha dicho a los miembros de la banda a lo largo de los años, convierten la ignorancia en algo ruidoso, desafiante y ridículamente pegadizo.
Pillowprince es una banda independiente con sede en Oakland que hace rock a partir de pliegues de cuero agrietados y eslabones de cadenas brillantes, de noches de luces de escenario con gel rojo y mañanas posteriores demasiado brillantes, de cabello enmarañado de alegría y peligro y, sobre todo, de cuerpos que se hacen lugares que sólo ellos conocen.
La compositora y guitarrista Olivia Lee (de There’s Talk) canta sobre la alegría, el dolor, el amor y la subversión queer, puntuando la cruda sinceridad con vibrantes y melancólicos riffs de guitarra. Junto con Sea Snyder en la batería, crean himnos densos y propulsores de shoegaze.
Pillowprince’s ‘R the Straights OK’ is a defiant, catchy anthem against homophobia (USA)
The American project Pillowprince shares the single R the Straights OK. The musical universe proposed by this song unfolds within a solid, fresh, and intriguing structure, influenced by genres such as Indie Rock and Alternative Rock. The music reflects the emotions of the lyrics in an engaging, deep, and powerful way, creating a track that captivates both in sound and message.
The magic of the song lies in the lyrics and vocal performance, which build a challenging, smart, and refined reflection. It mocks homophobia and ignorance, resulting in a rock anthem with catchy moments. Furthermore, the song conveys its emotions and message directly, showing notable empathy for the queer community.
The lyrics, which come straight from real things people have said to members of the band over the years, flip ignorance into something loud, defiant, and ridiculously catchy
Pillowprince is an Oakland-based indie gaze band that makes rock from cracking folds of leather and glittering chain link, from nights of red-gelled stage lights and mornings after that are way too bright, from hair matted with joy and danger and most of all from bodies making places for themselves only they know.
Songwriter and guitarist Olivia Lee (of There’s Talk) sings about queer joy, pain, love and subversion, punctuating raw sincerity with vibrant brooding guitar riffs. Together with Sea Snyder on drums, they create dense, propulsive shoegaze anthems.
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